28/7/08

Libertad de elección: ¿Andas bajo de energía?

Cuando fui a la consulta ciudadana, cual fue mi sorpresa (no realmente, pero hay que añadir dramatismo) cuando como siempre estaban las dos opciones, la A y la B, la 1 y la 2, la primera y la segunda…

Efectivamente, no podemos escapar aparentemente de esta maldición, una consulta ciudadana sobre la reforma energética de México bajo la regla de las dos opciones, con dos posibles respuestas, analicemos:

1 Actualmente la explotación, transporte, distribución, almacenamiento y refinación de los hidrocarburos (petróleo y gas) son actividades exclusivas del gobierno. ¿Está usted de acuerdo o no está de acuerdo que en esas actividades puedan ahora participar empresas privadas? SI / NO

2. En general, ¿está usted de acuerdo o no está de acuerdo con que se aprueben las iniciativas relativas a la reforma energética que se debaten actualmente en el Congreso de la Unión? SI / NO

Ambas preguntas dicen lo mismo, pero el truco es que la gente no se de cuenta de ello, y donde deben decir si digan no y viceversa. Se cuantifica preferentemente la opción donde más conviene, olvidando la contradicción de la opinión en la otra pregunta.

Bajo un panorama donde la ciencia positivista piensa que preguntando a la gente y creyendo en la más clara opinión podemos lograr cambios, cuantifican sus opiniones a su favor; la realidad es que el más lucido analista, con una visión a futuro y un desinterés por el poder podría darse cuenta de cual es el mejor camino, y preguntando a la gente un ¿verdad que sí? o ¿verdad que no? es como un padre manipulando a su hijo para sus propios caprichos.

Aunque un tanto lógica y cuadrada parece ser caracterizada la creencia de Merovingian en Matrix, aquella opinión sobre la ilusión de la elección, creada por los que tienen poder y los que no, sinceramente parece ser una perfecta analogía en el mundo actual, bajo éste tipo de situaciones.

Una tercera conclusión que puedo ofrecer es siempre pensar hasta que punto nuestras elecciones, no nada más las oficiales, sino las que hacemos todos lo días, están sujetadas ante nuestros más puros deseos o a la racionalidad más lógica que podamos tener, sin que sean los deseos de otro; hasta que punto estamos conscientes de cada una de ellas; que futuro vendrá tras elegir y de que pasado proviene la decisión ya tomada.

21/7/08

Libertad de elección: seguridad en venta

Cuando regresaba a México del extranjero, me dí nuevamente cuenta de algo interesante, la libertad de elección. En el avión me ofrecían desayuno y yo con mucha hambre que tenía me dio mucho gusto poder comer; pero cual fue mi sorpresa cuando sólo podía elegir dos platos: “omelet o huevos con jamón”. ¡Sorpresa!, yo no podía comer huevo, pero tantas horas de ayuno hicieron que ese día fuera una excepción, porque sólo tenía dos opciones, ninguna me beneficiaba, pero tenía que agradecer el servicio.

La libertad de elección surgió como uno de los pilares de la modernidad, cuando el individuo cobró importancia y cuando la opinión pública fue un tema ambiguo pero recurrente. La mercancía se ha apoyado en modificarse de acuerdo al capricho del consumidor, al hacerse de múltiples facetas, crea la ilusión de que el individuo puede elegir entre ellas, cuando en el fondo se trata de lo mismo. Poco a poco, las elecciones se sobreponen creando confusión sobre qué es lo que uno quiere.

No fue sino hasta que los vasos de cristal se comercializaron, que los colores de las bebidas cobraron importancia; cuando el nombre de una marca adquirió una mayor valor que la calidad de un producto y su uso; y así sucesivamente, nos encontramos en una aparente elección en cuestión cotidiana, anclada en el discurso del derecho (y de la derecha), en realidad es una forma de control de la cual nos quisiéramos desprender, tal como Stan Marsh en este episodio.

Ahora me gustaría tomar como ejemplo la ley del ISSSTE en México. Es interesante hacer diversas observaciones sobre cómo nos quieren vender la ley, y digo literalmente VENDER, por que muy para mi sorpresa la forma en cómo es comunicada la imposición parece haber sido planeada por un guionista de infomerciales de domingo en la mañana; basta con ingresar a éste sitio para que puedan darse cuenta.

Como en mis experiencias relatadas en los inicios de los posts, tenemos sólo dos opciones: La opción A y la opción B, que para el caso es lo mismo pero dicho cada una con diferentes palabras y con números diferentes, que si se multiplican o dividen resultan en la misma cantidad. También me tomé la libertad de elección de observar el apartado de casos reales, por ello mi inclinación a pensar en un infomercial, donde le pagan a alguien para que venda el producto.

Finalmente, le dí una leída a la parte de preguntas frecuentes, en esta otra página, donde curiosamente las preguntas son aquellas que nos preocupan a todos, pero son respondidas de forma positiva. “Nada va a cambiar, nada va a desaparecer, todo va a seguir igual”, y así sucesivamente. Si todo va a seguir como antes, ¿Porqué la reforma? Simple, porque algo no va a ser como antes, obviamente.

Como una segunda conclusión, las ilusiones de libertad de elección están hechas para hacer creer que es la persona responsable de lo que ella elije, que su decisión es lo que vale y que tiene más de una opción, una adicional que por lo general devendrá en el mismo resultado. En ese juego de ilusiones es donde las clases sociales constantemente son enriquecidas por un lado y empobrecidas por el otro. Y una de las cuestiones peores del asunto es ver cómo los científicos, aquellos portadores de la voz de la verdad razonada, piensan que esos males son externos a nosotros, productos de años de evolución y tecnología.

Para finalizar este post, les dejo un divertido video de la banda Devo.




7/7/08

Realidades sobre las lenguas de señas

Traducción del texto “Realoj pri signolingvoj

Comienzo con algo que muchos se estarán preguntando: ¿Existe sólo una lengua de señas? La respuesta es definitivamente no. Cada país (quizás no todos en el mundo pero si una gran parte) cuenta con su propia lengua de señas y a veces con más de una, como el caso de México, que cuenta con la Mexicana y la Yucateca. La lengua de señas no es algo universal como muchos piensan; a decir verdad, son lenguas que poseen una estructura y reglas gramaticales como cualquier otra; pero claro, sus propiedades y forma son distintas. La lengua de señas no es tampoco una señalización de un idioma, por ejemplo, la lengua de señas mexicana es una cosa un tanto diferente de lo que es el español signado, el cual es tratar de decir algo con reglas que existen en la gramática del español pero con la lengua de señas.

Esto rompe también el mito de que la lengua de señas es algo improvisado que fácilmente los sordos (curiosamente no los oyentes) entienden de forma natural. Es claro que los sordos lo entienden por que muchos de ellos son educados con esa lengua y también pasan por el proceso de aprendizaje, por lo que no son expertos señantes de la noche a la mañana. La lengua de señas, por su carácter gestual, puede ser en muchos momentos entendida a grandes rasgos, siguiendo una aparente idea, pero al igual que las palabras, muchas veces lo que parece decir no es lo que se está diciendo.

En el caso de la universalidad de la lengua de señas, existe una lengua internacional de señas, comúnmente llamado gestuno, que a manera de esperanto pretende utilizarse entre señantes de diferentes nacionalidades, sea para eventos de carácter internacional o para socializar en un país o región extranjera. El siguno, una amalgama de esperanto y gestuno, en realidad se trata de un código de letras en esperanto hechas con señas del gestuno, es decir, no se trata aún de una lengua de señas formal y aun dista de un uso común tanto de la comunidad internacional de señantes como de los esperantistas.

Otro aspecto interesante es la escritura. Se piensa que las lenguas de señas no tienen escritura. Es cierto en el sentido de que no es algo que se use e incluso se conozca, pero si existen muchas investigaciones que han tratado de desarrollar una forma de escritura. Aunque si se pudiera desarrollar una buena escritura, habría que superar algunas cuestiones fundamentales: el espacio, el tiempo y el conocimiento de la persona.

El espacio es de suma importancia en las lenguas de señas, sirve como escenario; como sostén de ideas, personas, objetos; como organizador de lo que se está diciendo, lo que muchas veces ahorra el repetir señas de algo que por su ubicación en el espacio se conoce; esta cuestión plasmada en dos dimensiones es algo sumamente difícil de concebir. El tiempo, más allá de la temporalidad de las frases e ideas, es necesario identificarlo con los movimientos, sean rápidos o lentos, le que le dan aspecto a las señas, lo cual muchos debemos presenciar para poder entender lo que se dice; por ello, conocer a la persona, tanto al ser humano en general, como al señante nos permite deducir muchas veces cuestiones que un humano plano y homogeneizado de dos dimensiones de temporalidad congelada no nos podría decir.